Editorial: Círculo Rojo
Número de páginas: 72
Precio:0,93 € (ebook)
Sinopsis [de amazon]: En la floreciente Venecia de los mercaderes y los grandes viajes, dos jóvenes se prometen amor para toda la vida. Muchos
años después, cuando audaces navegantes arribaron a una remota isla,
oyeron la historia de amor que aquí se cuenta y que comienza así: ―¡Escuchad, escuchad! Gentes de Nam... Ella contaba cuentos y yo era un mercader en Venecia.
Hace un tiempo, la bloggosfera se llenó de reseñas de esta novela breve, y yo, ilusionada porque todas eran positivas, la apunté en mi lista de pendientes. Como en Amazon está a un precio irrisorio, le pedí a mi hermana (que es la que tiene un Kindle y puede comprar ebooks en esa tienda virtual) que me lo comprara y por fin pude leerlo.
Antes de ponerme con la reseña en sí, quiero deciros que me ha costado mucho decidir dos cosas. Primero, si hacer reseña o no (y ahora explicaré por qué) y segundo, si hacer una reseña o incluirlo en la sección Breves Existencias. Al final, ha ganado lo primero en ambos casos.
No sabía si hacer reseña porque, en términos generales, este libro no me ha gustado, no me ha llenado, ni me ha transmitido nada. Y, no sé qué pasa últimamente, que parece que está mal visto hacer reseñas negativas de autores españoles y más aún si están autoeditados. Yo lo siento por Pilar, pero no a todos nos pueden gustar todos los libros.
Resulta muy difícil, a veces, hacer una reseña de una novela que no ha gustado, porque no siempre se puede explicar el por qué. Me pasó con La conspiración de Melengar y me vuelve a pasar ahora, pero voy a intentarlo.
Es una novela diferente, narrada de una forma poco habitual, lo cual me suele gustar, y que se lee de una sentada. Así lo he leído yo, con una breve pausa de unas horas porque, a pesar de contar sólo con 72 páginas, se me ha hecho pesada. Reconozco que, objetivamente, no le encuentro fallos ortográficos ni de redacción, creo que Pilar tiene un estilo propio muy definido y que, sencillamente, no encaja conmigo.
Es una pequeña fábula, una historia en la que más que el argumento, importa la forma de contar... y cuando la narración no te gusta, algo está fallando. Reconozco que el final, las últimas páginas, me han gustado mucho, pero casi habría preferido una historia más breve, con algunos capítulos de principio y ese final, que lo que he leído. Vamos, un cuento aún más breve de lo que ya es.
Me ha costado mucho entender a los personajes, pero claro, supongo que la idea no es entenderlos, sino dejarte llevar por las palabras, por la fluidez con la que están escritas y disfrutar de esta historia casi lírica.
Insisto, recalco y repito que es mi opinión, que es totalmente subjetiva y que, si a alguien le ofende, el problema es suyo, pues ni es mi intención ni creo que encontraréis en mi crítica palabras ofensivas.
Así que, en definitiva, ni recomiendo ni dejo de recomendar este libro. Para mí ha pasado sin pena ni gloria pero tiene muy buenas críticas por internet y, supongo, que por algo será. También ha ganado un premio literario y no seré yo quien le quite el mérito.
Por mi parte, quizá repita con la autora, quizá no, no lo sé, pero desde luego no me ha enamorado su libro.