Editorial: Norma
Número de páginas: 223
Precio: 14 €
Sinopsis: Es el último día de trabajo de Hartigan pero no puede irse sin cerrar un trato. La pequeña y flacucha Nancy Calahan, secuestrada como otras tantas niñas para ser violada brutalmente y asesinada por Junior Roark, el hijo del Senador. En la corrupta Sin City, Hartigan debe ser el último policía honrado que queda, y eso le valdrá muy caro, pero merecerá la pena con tal de salvar a Nancy... al menos una vez.
Esta es la última de las historias de Sin City que versionaron en la película. Si la habéis visto, es la del tipo amarillo, con Bruce Willis como protagonista (y yo que no me he podido quitar su imagen de la cabeza ni la voz de Ramón Langa al leer los monólogos)
Cuando leí este cómic por primera vez me gustó mucho más, la disfruté muchísimo y la devoré. No sé si ha sido por saber qué iba a suceder, pero esta relectura no me ha gustado tanto. Lo que quiere decir, que antes me pareció el mejor hasta la fecha, pero ahora no. Es muy bueno, es increíble, es una historia durísima... pero quizá no el mejor de la serie.
Seguimos con la misma estructura narrativa que en los anteriores: protagonista (perturbado, oscuro, con heridas profundas en el alma...) que va narrando lo que le ocurre a modo de monólogos combinado con viñetas en las que transcurre la acción. Quiero decir, que el protagonista narra lo que no está ocurriendo, y las viñetas complementan la acción, que me explico a veces igual que un libro abierto (pero boca abajo y en otro idioma).
En este tomo de la serie tenemos una variación respecto a los anteriores. Sigue siendo en blanco y negro, excepto Junior Roark, que después de su encuentro con Hartigan y tras un tratamiento intensivo en el hospital, se volverá amarillo. El amarillo hediondo de la enfermedad, muy acorde a su alma corrompida.
Aquí conoceremos en profundidad a Nancy, que no es otra que la bailarina del lazo y el sombrero vaquero que ha salido ya como secundaria en prácticamente todos los tomos anteriores (por no tirarme a la piscina y decir todos, que yo diría que sí), y además de tener un cuerpo escultural por el que todos babean, esconde terribles secretos.
De las historias más duras y, desgraciadamente, tan cercana (pederastia, grandes poderosos que pueden hacer lo que quieran y salir impunes) que parece algo que puedas leer en las noticias. Una historia agridulce, pero que merece la pena leer.
1 comentario:
Sigamos pues con Sin City. Gracias.
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